El desarrollo de pruebas de campo arrojó resultados sorpresivos en cuanto al conocimiento de las problemáticas psicosociales tratadas por el presente análisis.
El entorno familiar mostró una marcada resistencia a la existencia de estos problemas analizados.
Invalidando en varios casos investigaciones realizadas por profesionales de renombre mundial que tratan problemáticas relacionadas a la salud y educación de niños y adolescentes expuestas en este análisis. Este marcado índice se atribuye a una posible falta de conocimiento y capacitación del entorno familiar, como así también un temor a la exposición de la información privada sensible del diagnóstico.
El resultado agrava la situación de control, desencadenando problemas no reversibles en determinados casos por una decisión sin fundamentos del responsable del niño o adolescente.
El entorno educacional mostró un relajado rol en cuanto a la detección y tratamiento de las problemáticas expuestas, notificando enfáticamente sus problemas en cuanto a estos trastornos, pero delegando responsabilidades al entorno familiar en porcentajes abrumadores.
Esta tendencia preocupante demuestra una falta de conocimiento y capacitación de los profesionales docentes en cuanto a la detección y tratamiento de estos flagelos sociales en contexto educacional.
Si bien el puntal detectado, fue relajado, los establecimientos educativos marcan fuertemente los problemas que poseen en cuanto a desempeños no manejables, pero abordan el tema exponiendo soluciones alternas para nada beneficiosas al objetivo educacional, y provocando brechas marcadas y también irrecuperables con el pasar del tiempo.
El entorno profesional mostró conocimientos básicos de estas problemáticas, afirmó una segmentación marcada entre los ambientes, una dificultad notoria en la detección precoz y una falta de homogeneidad entre las partes implicadas en cuanto al tratamiento.
Se capturó instantáneas diversas abordando enfoques psicológicos, neurobiológicos y conductuales, definiendo mayor interés por resultados psicológicos, en donde tiene marcada ventaja de detección en cuanto a los primeros contactos.
Tengo que remarcar que uno de los problemas mayormente tratado por este análisis es TDAH, el cual tiene una raíz neurobiológica que si es agravada por el entorno social en donde se desempeña el niño, adolescente o adulto, pero en ningún momento es detectada en primer instancia por un profesional de estas características.
La etapa de implantación piloto realizada mostró un alto grado de efectividad en la detección individual, no solo de TDAH, sino de problemas alternos, reveló datos interesantes sobre la vida social de la persona evaluada, brindando alertar sociales alternativas, desencadenando en un posible desarrollo diverso en análisis actual (conexión socio-legal, interfaz de alertas sociales)
Además mostró interesantes tendencias en cuanto a tratos sociales dentro del entorno de la persona, posibles discrepancias tratables, malos hábitos, deficientes conocimientos o conceptos erróneos de temas comunes, que rápidamente pueden ser corregidos sin marcar una huella profunda no controlada.
Se valoró mucho la autogestión de conocimientos, esto marca que los conceptos impartidos por los profesionales de la educación no llegan a todos las personas por igual, implica una falla estructural en el método de exposición, que puede ser corregido o cotejado para el éxito global del establecimiento.
Otra valoración muy puntual es la gestión y delegación que se permite ante problemas críticos con el profesional especialista, la retroalimentación continua de avances y el enfoque multimodal permitido.
En líneas generales se llegó a un resultado primario muy interesante, una mejora
notable en todas la líneas de acción, porcentajes de efectividad por arriba de los valores estimados, permitiendo resolver más del 70% de casos en forma segmentada como fueron las pruebas, implicando un mayor porcentaje en el momento de mecanizar el entorno en su conjunto.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario